lunes, 27 de junio de 2016

Futuro en venta

Bajo sus nieblas y garúas Lima oculta curiosas y secretas complejidades. A esta geografía de pálidos brillos solares y rancias tradiciones, un texto de Gonzalo Rodríguez Risco añade una inusual lluvia cuyas gotas develarán los proyectos irrealizados o sueños pospuestos de una república.
"Nunca llueve en Lima"
En “Nunca llueve en Lima” el autor explorará este desfase de oportunidades a través de un opaco cristal: Los Sileri, una tradicional familia limeña venida a menos. Los episodios de añoranza, desarraigo o desinterés atormentarán a sus miembros y visitantes por una hora y media de función. Ya en manos del director Alberto Ísola el metafórico texto alcanza buen ritmo y sólidas interpretaciones. Con ellas abordará dilemas y anhelos de un abuelo, un padre y una hija enfrentados por la venta de una casona. ¿Puede el pasado reservar alguna esperanza futura para esta familia? Al parecer, sí.

ESPEJOS FAMILIARES
La historia transita en la absoluta disfuncionalidad. Don Rafael (perfecto Carlos Tuccio) y su inseguro hijo Sebastián (Lucho Cáceres de buenos matices) llevan una relación difícil. La severidad de Tuccio y los arrebatos inmaduros de Cáceres imprimen frialdad y una ternura espontánea. Su hija Daniela (comprometida Patricia Barreto) es el soporte económico y anímico del clan.
Daniela (Patricia Barreto) y Roy (Emanuel Soriano)
En su grácil figura oculta una fortaleza que va debilitándose; mientras que doña Elena (Haydeé Cáceres), la vecina de la familia, irradia la tranquilidad de una abuela entrañable o una madre ausente. Junto a ellos, Juan Pablo, Gladys y Roy son una familia reconstruida, un espejo distorsionado de los Sileri. Con dosis de humor, antipatía o sensibilidad Pold Gastello, Magali Bolívar y Emanuel Soriano lucen acertados papeles. La tensa convivencia bajo la incesante lluvia marca las mejores escenas del montaje. Y, en especial, la química entre los personajes más jóvenes (Barreto–Soriano) afianza la esperanza.

UN AMPLIO PARAGUAS
Cada detalle suma en Nunca llueve en Lima. Por ejemplo, apuesta por un realismo explícito gracias a una atmósfera visual (preciso diseño lumínico de Mario Ráez), musical (selección de Alberto Ísola) y los singulares efectos utilizados para crear un escenario inquietante.
Sebastián (Lucho Cáceres) y Daniela (Patricia Barreto)
Esta tragicomedia limeña –de estreno mundial– funciona, pero no excede sus estándares. Alecciona con suavidad a su público, aunque la remece en puntuales momentos  gracias a su elenco. Una sensación que proviene de su texto dada la amplitud de conflictos que plantea y que no parece resolverse. El no esclarecer una resolución diluye, en cierto modo, la expectativa de los conflictos propuestos. Hacia el final se restituye un poco el equilibrio familiar cuando se esperaba alcanzar un involucramiento a nivel macro. En este caso, no fue la cantidad de precipitación sino el tamaño del paraguas.

FICHA ESCÉNICA
Nunca llueve en Lima” de Gonzalo Rodríguez Risco
Dirección: Alberto Ísola
Elenco: Carlos Tuccio, Haydeé Cáceres, Lucho Cáceres, Patricia Barreto, Pold Gastello, Magali Bolívar y Emanuel Soriano
Diseño de iluminación: Mario Ráez
Selección musical: Alberto Ísola
Diseño de escenografía: Marijú Núñez Malachowski
Lugar: Teatro Británico (Ca. Bellavista 527, Miraflores)
La temporada culmina el lunes 27 de junio
Más información en el evento de la obra
Una producción de Escena Contemporánea

No hay comentarios:

Publicar un comentario